Fotógrafo:Lluis RosEl proyecto consiste en un lounge bar que nace con una premisa base:la singularidad y el trato exclusivo al clienteSe conforma a partir deun espacio único que sea capaz de generar una gran cantidad de percepciones: visuales, cromáticas, auditivas y sensitivas.
Como solución, se propone realizar una malla metálica tridimensional formada por más de 300 piezas diferentes y que al deformarla, estirarla y moldearla, se adapta a la arquitectura existente del edificio donde se inserta.
Así, se presenta como una sola envolvente que va generando diferentes espacios, y que a la vez los separa visualmente. Una única solución; un elemento unitario pero con multiplicidad de variables.
Los requerimientos básicos del cliente fueron realizar un Pub – Bar elegante, moderno y único con todas las comodidades para los usuarios, reciclando el interior de un edificio antiguo en muy malas condiciones y sin ningún valor arquitectónico ni patrimonial. El primer paso fue la definición de la idea concepto del proyecto; un local en donde se encuentre el cielo y el infierno, para posteriormente asignarle el nombre de LIMBO. El local tiene una capacidad para albergar a 120 personas sentadas y se distribuye en dos plantas con una conexión visual y espacial entre ambas.
El diseño del proyecto esta inspirado en crear dos espacios que representan cada uno al “cielo” y al “infierno” respectivamente. Existe un contraste y dualidad entre ambos espacios logrado con el uso de materiales, mobiliario, texturas, colores, formas, tipo de iluminación y sensaciones que pueda experimentar el usuario en cada unos de los espacios.
Ambos espacios conviven con características totalmente diferentes, separados por una línea que atraviesa todo el local desde la acera en el ingreso hasta el último rincón al interior del Pub. La barra ocupa casi todo el ancho del local, dividiéndose en cielo e infierno: una mitad en color blanco con sillas de cuero e iluminación fluorescente blanca y la barra hacia el sector infierno con madera quina vista barnizada, piedra oxidada cortada en bruto, texturado de muro en color chocolate e iluminación fluorescente roja.
Planta 01
El “cielo” es un amplio salón que llega casi a los 7 mt de altura conectado mediante una escalera en caracol con el mezanine. Sobre la escalera se construyó un cilindro en el cielo con una pantalla luminosa con la imagen del cielo, simulando una escalera hacia el cielo.
El mobiliario fue diseñado en metal y vidrio usando el color blanco en todos los muebles, pisos, paredes y cielo falso. La iluminación es intensa y clara con varios sistemas que funcionan de forma independiente brindando muchas combinaciones en cuanto a la forma de iluminación según el evento, desde conciertos a recepciones formales.
El escenario flotante fue diseñado de tal manera que cuando no se requiera de su uso, fácilmente se desarma en 3 piezas para ser guardado en el depósito; aumentando la capacidad de mesas en el local.
El “infierno” tiene menor altura y se asemeja a una caverna en sus formas y materiales; a diferencia del cielo, éste tiene colores oscuros y materiales usados en su estado natural como la piedra oxidada en el piso, el revestimiento de algunos muros, la madera en el bar, piedra gris tallada y hormigón para mesas y rocas en bruto que se usan como taburetes. La iluminación es tenue y cálida en el área de las mesas mientras que en la barra se usó luz roja fluorescente.
Así, se presenta como una sola envolvente que va generando diferentes espacios, y que a la vez los separa visualmente. Una única solución; un elemento unitario pero con multiplicidad de variables.
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